Un día a la vez...

No se si sea solo yo, pero a veces pienso en la muerte... en que pasaría si yo muriera.

Si no es normal, disculpen pero dentro de mis pensamientos diarios (casi siempre cuando me baño o lavando trastes) de vez en cuando pienso en como sería morir, que pasaría en mi entorno, que harían tales o cuales personas...  de hecho, no se porqué pero tengo el presentimiento que moriré relativamente joven...  osea que no me veo ya de muy viejito, pero bueno no se si deba escribir esto de hecho...   pero espero no se tome a mal.

Muchas veces escuchamos el -¿qué harías si hoy fuera tu último día?- y yo más bien pienso que pasaría si hoy hubieras muerto, que pasaría con tu hija, con tu esposa, tus familiares y amigos...   les dejarías una vida sencilla o se complicaría para todos??

Claro que más allá del dolor de la partida y esas cosas que el tiempo sabrá remediar...   pero realmente como crecería mi hija sin un padre a su lado, que la supiera aconsejar o guiar en los momentos importantes, que realmente pudiera tener un recuerdo de mi y no fotos guardadas en un cajón porque causan pesar, que hubiera podido trascender en ella....   Mi esposa podría rehacer su vida y buscar amor en alguien más...  como le haría con su trabajo y el cuidar a mi hija, terminaría siendo educada por mis suegros y cuñadas, mientras ella se refugia en su trabajo??  Mis padres y hermanos seguirían cercanos a mi hija y esposa??  Le hablarían de mi para que supiera como fui??

No se que pase después de la muerte y es algo que me intriga, pero no le temo...  no al dolor propio, o que si mis ojos no se vuelvan a abrir, le temo al dolor que sufrirán las personas a las que amo, como les afectaré...   Me gustaría poder saber que pasa con las personas que me rodean....  Ahora que lo escribo suena un poco egocéntrico, pero no es un saber cuanta falta les voy a hacer, más bien es un preocuparme por no dejarles cargas o con asuntos sin resolver....

En la Universidad nos hicieron una dinámica denominada "el muerto" que era precisamente esto,  te recostabas en el piso, cubierto por una sábana negra y todos tus compañeros te decían lo que sentían en ese momento y trataban de resolver los malos entendidos, o cosas no dichas...   una dinámica muy liberadora y que me dejo muchas enseñanzas.

Aun tengo muchas palabras que no he dicho, amistades por rescatar o seguir cultivando, muchos rencores por sanar, personas a las cuales decirles tantas cosas, trabajos por terminar, escritos que hacer, pensamientos que transmitir. Muchos círculos o etapas que cerrar....

Aun no es tiempo...  aun me falta tanto por hacer y sobre todo, por dar...

Así es que yo les pregunto -¿qué pasaría si hoy fuera tu primer día de muerto?-